El llamado “día negro” de Nvidia sacudió al sector tecnológico tras registrarse pérdidas millonarias en su valor de mercado. La caída, que generó alerta entre inversionistas, ha reavivado el debate sobre los altos costos asociados al desarrollo y mantenimiento de la inteligencia artificial. Obviamente, la irrupción de DeepSeek, el modelo de IA de código abierto, de origen chino y más barato, hizo temblar todo Silicon Valley.
En este contexto, analistas señalan que este episodio no solo refleja la volatilidad del mercado, sino también las dudas crecientes sobre la sostenibilidad financiera de las innovaciones en IA. ¿Qué fue lo que pasó?
Qué hace Nvidia
Actualmente, ChatGPT, de OpenAI y el modelo más utilizado en todo el mundo, necesita procesadores específicamente diseñados para inteligencia artificial, desarrollados por Nvidia. En sus comienzos, se dedicó a crear placas de video y gráficos para potenciar la performances de las computadoras de especialistas en diseño gráfico, 3D, edición y otros segmentos de la imagen.
Pero gracias a diversas innovaciones durante los últimos 15 años, la compañía radicada en Santa Clara, California, diseña sus Graphics Processing Units (GPUs) que pueden acelerar operaciones matemáticas. De esta manera, se le proporciona el hardware para que empresas como Google, Microsoft y OpenAI involucren funciones con inteligencia artificial en sus programas o aplicaciones.
En 2024, el CEO de la compañía, Jen-Hsun Huang, le entregó personalmente a Sam Altman y Greg Brockman, ejecutivos de OpenAI, la primera supercomputadora de inteligencia artificial del mundo. Su nombre es DGX H200.
Actualmente, su GPU GenAI se ha convertido en un pilar fundamental para aplicaciones de deep learning y avances en la investigación de IA. La popularidad de aplicaciones como ChatGPT ha impulsado el interés en la IA y ha posicionado a NVIDIA como un actor central en esta revolución.
Así, NVIDIA posee aproximadamente el 95% del mercado de GPU para aprendizaje automático, consolidando su liderazgo en la inteligencia artificial.
El lunes negro de Nvidia: perdió 600.000 millones de dólares
El fabricante de semiconductores estadounidense Nvidia encabezó una corrida en el sector de la inteligencia artificial en Wall Street este lunes, con una pérdida cercana a los 600.000 millones de dólares de capitalización bursátil.
La firma perdió unos 589.000 millones de dólares de valor en bolsa, derrumbándose más de 17% al cierre, una de las peores caídas en la historia, según la prensa estadounidense, con los inversores evaluando la posibilidad de una solución más rentable que la de grupos estadounidenses para la IA.
Pero la compañía no estuvo sola: el sector tecnológico fue especialmente castigado por los inversores, cayendo en conjunto un 5,58 %. Entre las empresas más perjudicadas, además de Nvidia, estuvo Broadcom (-17%), AMD (-6,3 %), Cisco (-5 %) Palantir (-4,4 %), Alphabet (-4,2 %) y Microsoft (-2,14 %).
