Manuela Charre salió cerca de las 7 de la mañana del edificio ubicado sobre calle Leiva, en Chacarita, para pasear a Chulo, su perrito. La mañana arrancó para ella como todas las de los últimos dos años: pensando en el trabajo, en las tareas del día y en qué faltaba para sumar a La Andariega, la trafic modelo 1995 que compró hace dos años para cumplir el sueño de armar su propio motorhome, recorrer Argentina y animarse a unir América. Pero ya no estaba.
La habían hurtado durante la madrugada de este jueves mientras ella dormía y se soñaba manejándola en las hermosas rutas de la Patagonia. No hicieron ruido, nadie de la cuadra se enteró de nada. Con esa camioneta se fueron años de ahorros y la inversión económica, material y sentimental de dos años para dejarla como estaba, casi lista para salir.
“Era un proyecto en el que comencé a trabajar hace dos años. Lo arranqué sola y luego se sumó mi novio. Por dos años completos deseé la llegada del día para poder hacer realidad mi sueño de recorrer Argentina con un vehículo así… Ya estaba terminado. Nos robaron todo lo que teníamos: nuestros sueños, nuestro tiempo, nuestras inversiones, nuestras ganas porque ahora, ¿qué vamos a hacer?”, se lamenta la mujer.
Realizó la denuncia policial por el hurto (no fue un robo porque la sacaron mientras estaba estacionada y sin agredir a nadie), se animó a pedir las imágenes de las cámaras de seguridad del bando de la esquina, pero al parecer nada pueden hacer por ayudarla.
“Hay cámaras en la cuadra. Las pedimos en el banco y nos dijeron que teníamos que hacerlo con la denuncia y, supuestamente, la policía tiene que llevarles un papel para que las muestren. En la comisaría avisamos que allí están esas cámaras, pero hasta el momento no las vieron”, le cuenta a Infobae.

Hace unos meses, Manuela y su familia recorrieron el Norte Argentino y parte de Cuyo
El sueño
Manuela tiene 32, es licenciada en Publicidad y trabaja como Art Director para una agencia de ese rubro. El ingenio que desarrolla en su trabajo y toda su imaginación le facilitaron la tarea a la hora de diseñar el interior de la camioneta que compró hace dos años, a costa de sacrificios y ahorros.
“Crecí con la imagen de un motorhome porque recorrer el país en uno siempre fue el sueño de mi mamá, y en la pandemia comencé a ver videos de otras personas armando uno con una camioneta, y quise hacer lo mismo, yo misma”, dice de la tarea que se tomó como prioridad en los fin de semanas de los últimos 24 meses.
Por esto, cada vez que la invitaban a un lugar los fines de semana se negaba. “Todos los pasé armando la camioneta, que cuando la compré a un señor era un transporte escolar, así que le desarmé todo el interior, tornillo a tornillo para comenzar a dejarla como quería, como había diseñado. También aprendí mucho de mecánica”, revive.
“Este tiempo, la tenía estacionada de donde la sacaron porque estaba trabajando en ella ahí, en la vereda. Antes estaba en Pilar pero estábamos yendo con mi novio todos los fines de semana para trabajar ahí y era mucho viaje”, dice y menciona que antes de eso la había tenido en una cochera pero ya no podía costearla por el valor mensual que le cobraban.

La Andariega fue hurtada en Chacarita en la madrugada del jueves 10 de noviembre
“La idea que teníamos era salir en enero, recorrer todo el sur argentino e ir subiendo hasta recorrer toda América y en el tiempo que fuera”, comparte el objetivo que acarició con los dedos. “Esto es muy reciente y aún lo estoy procesando, para mi es muy triste porque no es solo una camioneta, es más. Representa todos mis deseos”, dice.
Por tratarse de una camioneta de 1995 no fue asegurada contra todo riesgo. “Está asegurada, sí, pero por los años tiene un seguro muy básico que nos cubrirá nada, pero más allá de la plata tiene un precio sentimental”, dice entre lamentos.
Describiendo sus sensaciones, agrega: “Siento mucha impotencia. Ya está la denuncia, pero por el modelo y el porte no es una camioneta que pase desapercibida, imagino que la desarmaron toda para vender las partes”, opina y cuenta: “Les pregunté a todos los vecinos si tenían cámaras y hablé con mecánicos de este tipo de vehículos para advertirles que si les quieren vender algún repuesto puede ser de mi camioneta y que me avisen”.
Confiando en que quizás siga en la calle, Manuela pide que si alguna persona llega a ver una furgoneta estilo trafic, blanca, patente ACT370, que mire en su interior porque está toda armada como una pequeña casa de madera, que ella misma diseñó e hizo.

El interior de La Andariega
El último viaje que hizo con su familia fue el pasado fin de semana a la Costa. De mayo a julio hicieron el único viaje largo.
“Esta camioneta también es importante para mi porque es mi primer vehículo, en ella puse todo mi entusiasmo y hasta mi familia porque todos me trajeron algo para ponerle. Hasta había armado una página de Instagram contando este sueño”, dice en referencia al perfil @la.andariega.ar donde recibe mensajes, en caso de que alguien la haya visto.
Desolada, finaliza: “Se desarmó el plan, seguiré trabajando para tratar de volver a ahorrar y comprar cuando pueda otra camioneta para volver a armarla. Esto modifica todo, aunque está la esperanza de que aparezca y de buena manera. Si la devuelven, porque no estaba como pensaron, y le sacaron el motor es como comprarla otra vez por el costo. Invertimos mucho dinero en ella, muchos días de trabajo intenso, en repuestos, de todo lo que se te ocurra, pero sobre todo pusimos nuestros sueños en ella. El sueño no lo van a matar, veremos cómo hacer”.