Al mismo tiempo, el representante del futbolista habló con la prensa y contó la versión de Franco sobre lo sucedido el pasado lunes en la madrugada y negó que la droga encontrada en el vehículo sea propiedad del arquero.
“Carlos circulaba hacia una franquicia de farmacias de turno, después equivocó el regreso y circuló en sentido contrario en el mismo puente por el que había salido. No se dio cuenta que era contramano. Se produjo una diferencia con el personal policial, le preguntaron si había tomado o por qué tomó el puente en ese sentido y dijo que no, que si quería que revisen el auto”, explicó Gerardo San Martín en diálogo con la emisora Cadena 3.
“Las autoridades revisaron el auto y encontraron una sustancia. Carlos desconoció su existencia y el contenido. Se dio intervención a las autoridades y se practicó un test in situ que arrojó resultado negativo. Después se remitió el auto a la fiscalía, porque no tenía a bordo el comprobante de las compras, si bien lo tenía en el teléfono. Quedó retenido el auto y después fue liberado. Carlos no fue el único que usó el auto. La gente que lo usó son amistades que viven en Córdoba, que no tienen nada que ver con el ambiente futbolístico. Por eso él solicitó que se le practicara el test”, agregó el agente del jugador.
Oriundo de Puerto Rico, provincia de Misiones, Franco tiene 28 años y comenzó su carrera futbolística en Crucero del Norte. Después de un largo recorrido por diferentes clubes del fútbol de ascenso en la Argentina, el arquero se fue a jugar a Bolivia, donde defendió el arco de San José por dos temporadas. Antes de llegar a Belgrano en 2019, actuó en el Aucas, de Ecuador