La diseñadora de moda sostuvo que, junto a su hermana Dalma, presentarán material para pedir ayuda por la adicción de su padre. Además, relató un episodio que vivió el día del cumpleaños de Maradona en octubre del año pasado: “Se estaba ahogando”
“Estoy cansada de que quieran entender algo que no es entendible. Hay cosas que son inentendibles. Cuando dejé de tratar de entender qué es lo que le estaba pasando a mi papá, pude acercarme como hija”.
Gianinna Maradona habló de la salud de su padre, Diego Maradona, y aseguró que junto a su hermana Dalma intentarán por medio de la Justicia que se trate la adicción al alcohol que sufre el actual DT de Gimnasia. “Estoy en el límite donde no tengo que exponer a mi papá. Si lo hago, es adelante de un juez. Que se pueda hacer judicialmente”, indicó este jueves en Intrusos.
Además, aclaró que tanto ella como su hermana no tendrían problema en firmar algún documento que pruebe que su interés no es económico. “Es lo que menos me interesa. Yo quiero que mi papá siga viviendo”, dijo, y reveló que recién “hace muy pocos días” pudo reconstruir lo que sucedió en Punta del Este en 2000 cuando su padre estuvo internado, al borde de la muerte, por una sobredosis. “En ese momento era muy chica, pero hoy, con 31 años, quise saberlas”.
Por su parte, contó que habló en reiteradas ocasiones con el médico personal de su padre porque no lo veía bien. “Yo tengo la obligación de decirle si hay algo que no está bueno para su salud”.
“El panorama del alcohol lo vienen negando hace un montón. No es algo de ahora, de la cuarentena”, enfatizó, y relató lo que vivió en octubre del año pasado cuando fue al cumpleaños de su padre. El primer encuentro fue por la tarde. Allí fue junto a su hijo Benjamín, su hermana Dalma y su sobrina Roma. En aquel entonces, destacaron que no lo habían visto “bien”, y se fueron.
“Pero después yo volví sin avisarle ni a mi hermana”, continuó Gianinna, y reprodujo la frase que le dijo a su mejor amiga, que fue con ella. “Necesito que me acompañes a ver a mi papá porque yo sé que esto no termina bien”.
Al llegar, se encontró con Maradona “dormido en una mesa”. “Con personas alrededor”, sostuvo, y afirmó que estaba Jana presente aquella noche. “Cuando mi papá se descompuso, Matías Morla (su abogado) se fue. Mi amiga lo quiso ir a encarar y yo le dije que lo grabe, porque después lo que dijera podía ser usado en su contra. “Un señor seguía cantando como si nada…”, lamentó Gianinna.
Entonces, según el relato de Gianinna, socorrió a su padre. “Corrí a agarrarlo. Se estaba ahogando”, recordó. Más tarde, “después de haberse ahogado, quisieron hacer que soplara la velita”, continuó, y reprodujo el diálogo que mantuvo con su padre y los que estaban presentes. “Había muchísimas personas”.
—Papá, ¿vos querés?
—No, no quiero.
“No quiere, se quiere ir a dormir”, les dijo a quienes estaban aquella noche. “Pero la está pasando bien…”, le respondieron. Sin embargo, Gianinna se llevó a su padre a la habitación y lo ayudó a acostarse en la cama.
“Después, empezó una situación horrorosa que me angustia un montón tener que haber pasado y tener que contarla. No me molestaría tener que mostrarle las fotos, o las cosas de ese día, a un juez. Pero no en la televisión. A un juez”, aseguró la ex mujer del Kun Agüero.
Entonces, sostuvo que tanto ella como su hermana están dispuestas a ir a la Justicia para tratar la adicción al alcohol de su padre. “Si puedo hacer algo, lo voy a hacer”. “Lo que se hizo en 2004, cuando a mi papá se lo pudo internar por su adicción a la cocaína, hoy no se puede”, destacó.
Por su parte, indicó que este tema “está lejos de ser una guerra Claudia Villafañe-Diego Maradona”. “Nosotras (Dalma y Gianinna) hemos vivido situaciones que no estuvieron buenas. Mi papá me agradeció un montón de veces que en su momento lo hayamos internado. Le dimos la responsabilidad a un juez. Hoy no se puede hacer legalmente”, remarcó.
Por otro lado, indicó que el día del cumpleaños de su padre se llevó un frasco de pastillas para analizar. Si bien no respondió qué arrojaron los resultados, manifestó su preocupación por la dosis que toma su padre.
“Yo ya no le digo que no tome alcohol. Pero él no lo disfruta. Ahí está el punto. No disfruta tomarse una cerveza. No lo disfruta”, agregó, y destacó que el domingo pasado, el Día del Padre, no pudo comunicarse con Diego.