Sociedad
Inundaciones en Neuquén: un cajón, la solución de emergencia con la que un pueblo deberá pasar el invierno para no quedar aislado
La crecida del río destruyó la pasarela que usaban los 60 vecinos de Pichi Neuquén. Ahora, tendrán que cruzar con un sistema de roldanas. El pueblo que tiene un solo teléfono fijo y que esperó 100 años a que se hiciera la luz.
Las lluvias y la crecida del río Neuquén provocaron inundaciones a lo largo de la cuenca, con 60 familias evacuadas en diferentes localidades de la provincia patagónica. La fuerza del agua anegó rutas y generó preocupación en los vecinos, algunos de los cuales quedaron al borde de la incomunicación con el resto del mundo. Sucedió en un remoto paraje de Manzano Amargo que se quedó sin puente y ahora deberá cruzar en cajón.
Pichi Neuquén es un poblado de 60 habitantes ubicado en el noroeste de la provincia. Está localizado a 350 kilómetros de la capital y unos 15 kilómetros al sur de Cajón de los Chenques, desde donde baja el río para unirse con el Limay y forma el Río Negro. El nombre de la localidad se debe a que se ubica justo donde se abre un brazo menor del curso de agua: “pichi”, en mapuche, significa pequeño.
Según previsiones oficiales, el río se acercaba a una marca histórica de 600 m3/s. En los últimos días, las autoridades derivaron parte del caudal a canales de riego a través del dique Ballester. Sin embargo, sigue habiendo unos 200 evacuados y las inundaciones -donde cedieron- dejaron secuelas.
Ocurrió con la pasarela que utilizaban los habitantes de Pichi Neuquén para cruzar el río. Lo mostró la intendenta de Manzano Amargo, Malvina Antiñir, con un crudo video en el que se ve la pasarela agitada y destrozada por el furioso torrente.
Poco persiste de la estructura. Si se suma la anegación de la ruta 54, Pichi Neuquén quedó al borde del aislamiento total. Salió al rescate una vieja modalidad: cruzar el río a bordo de un cajón.
Los parantes son los mismos de la pasarela. Con roldanas y cables se tendió, donde estaba el puente, una guía por la que -como en una tirolesa- se desplaza una celda metálica. A ella deben subirse los vecinos, con sus bolsas y mascotas, que quieran regresar a su casa.
“Pudimos trasladar a varias personas, lo cual significo la tranquilidad para sus familias”, celebró Antiñir en un posteo en Facebook. Con esta modalidad, de larga data en otros puntos de la provincia, deberán atravesar el invierno. Es “una alternativa que tendremos hasta que pase este invierno ya que no se puede trabajar por las inclemencias climáticas”, advirtió la jefa comunal.
La primera pasarela había sido levantada recién en febrero de 2016, en una obra de 200 mil pesos, como oportunamente informó el diario Río Negro. Hasta entonces, los vecinos bordeaban el curso y cruzaban saltando piedras.
Ahora, los problemas también afectan a los 400 habitantes de Manzano Amargo: como la circulación sigue siendo imposible en la ruta, se abrió con topadoras y palas mecánicas un camino paralelo, como si se tratara de un by-pass.
Pichi Neuquén, el pueblo que esperó que se hiciera la luz
El poblado temió que el agua volviera el tiempo atrás, cargándose lo que el progreso demoró tanto en concretar. Es que el tendido eléctrico sufrió daños por las tormentas y las inundaciones. Y los vecinos vieron apagarse la luz.
El Ente Provincial de Energía del Neuquén (EPEN) tuvo que abrirse paso e implementar parches de emergencias para restablecer el servicio de electricidad, que estuvo interrumpido desde el jueves y el lunes pasados. Lo hicieron detrás de camiones de gran porte de Vialidad, que le facilitaron el camino entre el barro y el agua.
Para los 60 vecinos de Pichi Neuquén el peligro tenía también un peso simbólico: corría riesgo lo que tanto les había costado conseguir.
Fue recién en abril de 2017, después de un siglo de espera, que la luz llegó al apartado paraje a orillas del río. Se hizo con una obra que demandó unos 5,5 millones de pesos de aquel entonces, un monto que sirvió para edificar una planta de almacenaje y vaporización de gas licuado petróleo. Con ella reforzó las prestaciones acotadas de los paneles solares. Velas y faroles, en sus distintas presentaciones, eran los otros modos de iluminarse la vida.
La inauguración coincidió con el 29° aniversario de Manzano Amargo y contó con la presencia de quien ocupaba la gobernación, Omar Gutiérrez, quien aprovechó ese momento para hacer otro anuncio ansiado: la construcción de una sala velatoria.
Las buenas noticias volvieron en marzo de 2022, con la introducción de internet en el Escuadrón de Gendarmería Nacional y la Escuela Primaria N°236. Además, instalaron un teléfono fijo, con sistema IP, en la oficina de la Delegación de la Comisión.
