Economia
La empresa italiana Enel le dijo a Javier Milei que podría desistir de vender Edesur
El Presidente se reunió en el Aeropuerto de Ezeiza con los directivos de la firma en la previa de su viaje al Foro de Davos. Saludo a la desregulación del sector energético que propone La Libertad Avanza
La empresa Italiana Enel le transmitió al presidente Javier Milei que podría rever sus planes de salir de la Argentina ante la desregulación del sector energético que lleva adelante el Gobierno. Como parte de su plan de retirada la firma buscaba desprenderse hasta finales del 2023 de su participación en la distribuidora eléctrica Edesur, en medio de un momento crítico del sector, episodios de cortes de suministro el verano pasado y su enfrentamiento con la gestión del Frente de Todos, la cual intervino la subsidiaria e incluso amenazó con la posibilidad de una expropiación.
“Las ideas claras que tiene Milei sobre cómo recuperar el sector de energía eléctrica, liberalizar el mercado y regularizar las pendencias del pasado, podrían hacer repensar los planes de salir de Enel en Argentina”
Los ejecutivos de la empresa italiana se mostraron optimistas con lo que escucharon de Milei, en particular sobre el respeto de los contratos vigentes y la defensa de la propiedad privada. “En valor necesario para apalancar la inversión y desarrollo del país, algo que parece normal en el mundo pero en Argentina no se ha dado en los últimos años”, mencionó uno de los presentes.
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Milei mantuvo este lunes un breve encuentro con el CEO global de Enel, Flavio Cattaneo.Otro de los que participó de la reunión sostuvo que la desregulación que impulsa el Gobierno actual y las medidas recientes “van en la línea de lo que hacen los demás países y dejará a Argentina más competitiva , en cuanto se vayan concretando seguramente va atraer inversión extranjera”.
Enel es la utility más importante de Europa, con una inversión de USD 27.000 millones en la región durante los últimos años fundamentalmente en Brasil, Chile y Colombia. En Argentina, producto del intervencionismo estatal de los últimos años, habían decidido vender sus operaciones y salir del país.
El año pasado, Enel enfrentó una polémica por el servicio de Edesur con la que vende energía a alrededor de 2,6 millones de clientes en la Ciudad de Buenos Aires y 12 partidos del Gran Buenos Aires
De hecho, a principios del año pasado vendió sus plantas de generación térmica por USD 102 millones. Allí cerró el acuerdo de venta para su participación del 75,7% en Central Puerto y del 41,2% en Central Dock Sud.
El año pasado el Grupo Enel enfrentó una polémica por el servicio de su subsidiaria en el sector de la distribución eléctrica, Edesur, por la cual vende energía a alrededor de 2,6 millones de clientes en la Ciudad de Buenos Aires y 12 partidos del Gran Buenos Aires. En marzo del 2024 el Gobierno de Alberto Fernández intervino la distribuidora por 180 días en medio de una ola de cortes masivos y prolongados de suministro durante una ola de calor.
En ese momento se aplicó una multa de $1.000 millones y el entonces titular del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), Walter Mertello, anticipó que se analizaba la expropiación de Edesur. Además se iniciaron acciones penales contra los directivos de la subsidiaria.
En ese marco, se avanzó con el proceso de venta de Edesur en manos del Banco Santander. Las ofertas recibidas no fueron suficientes en medio de la incertidumbre sobre quién iba a ganar las elecciones presidenciales y se esperaba reiniciar la gestión en 2024, aunque ahora eso finalmente podría no suceder.
