El drenaje de reservas se desaceleró en el último mes pero la cantidad de dólares en poder del BCRA sigue siendo critico y así lo advierten algunos economistas. Martín Redrado es uno de ellos y alertó que la autoridad monetaria tiene divisas para menos de 30 días.
“Tenes un BCRA sin reservas, este es el principal problema del desierto que tiene que caminar la economía argentina en los próximos meses sobre todo hasta marzo. No hay ni para 3 semanas de importaciones y hacia adelante no hay mayor oferta de divisas, al contrario hay mayores pagos”, aseguró el economista en el programa Opinión pública conducido por Romina Manguel por Canal 9.
Esta también se convierte en una de las preocupaciones del Gobierno, quien prepara un colchón de aproximadamente USD 6.000 millones para frenar el drenaje de reservas y así estirar la paz cambiaria. De ese total, USD 3.000 millones corresponden a desembolsos de organismos multilaterales y otros USD 3.000 millones como respuesta a un anuncio que preparan para antes de fin de año. Sin embargo, Redrado explica por qué el país atraviesa un sendero complicado: “Hablo de sequía en términos de que tenemos una cantidad de pagos donde no hay suficientes reservas. Hoy las reservas netas del BCRA son 4.000 millones de dólares, para ponerlo en perspectiva las importaciones de un mes en Argentina son 7.000 millones de dólares”.
Como si esta problemática no bastara, la coyuntura económica también tiene que lidiar contra la inflación, un fenómeno que mes a mes recorta el poder adquisitivo de la gente y que está denominado como la problemática más grande que enfrenta el país. Así también lo destaca el ex presidente del BCRA: “El principal problema que vemos es que no hay una lucha contra la inflación. Vamos caminando a un 6% mensual de piso que tiene el fenómeno en los próximos meses y no hay miras de que se recupere el salario real”.
Massa prepara un colchón de USD 6.000 millones extra para frenar el drenaje de reservas y estirar la paz cambiaria (REUTERS/Agustin Marcarian/Illustration)
“Tenemos una economía que transita por el desfiladero, de un lado el abismo inflacionario y del otro el cambiario”, asegura Redrado.
Con el correr del tiempo, el sueldo alcanza para cada vez menos cosas y eso explica, según el economista, por qué actualmente se ve a más gente gastando su dinero: “Cuando vas a los restaurantes, bares, nadie quiere tener pesos en el bolsillo, están quemándolos. En nuestro equipo estimamos que en el último trimestre el salario real de los trabajadores privados registrados, aquellos en blanco, corren detrás de la inflación, por delante del incremento de salarios. A vos te dicen que tu gremio aumenta 100% en adelante, pero estos aumentos son escalonados, viene un 27 en noviembre, después otro tanto en febrero, junio y la inflación le va ganando”.
Ante esta situación, el especialista considera que históricamente el país abordó esta problemática desde una sola óptica, ya sea fijar el tipo de cambio, controlar precios internos el dólar, subir la tasa de interés: “Es tan difícil porque siempre hemos tratado de encontrar atajos en la política económica. Esta tiene vasos comunicantes y para atacar un problema complejo como la inflación no hay que hacerlo desde distintos andariveles, primero con una ley que dé estabilidad macroeconómica, con una ley que marque cuánto va a crecer el gasto público en los próximos años, y además que los ministros sean responsables de cada 3 meses de dar cuenta de cuánto y cómo están gastando”.
Por su parte, el Gobierno apuesta a que la inflación se haya estacionado cerca del 6% en octubre y, así, la tasa acumulada en los últimos 12 meses se aceleró a 87 por ciento. De esta manera habría una leve mejora, ya que en septiembre fue del 6,2%, lo que provocó que el equipo económico empezará a buscar un acuerdo de precios como complemento al ajuste fiscal.
El especialista considera que históricamente el país abordó la inflación desde una sola óptica
“El principal problema que vemos es que no hay una lucha contra la inflación”, destaca el economista.
Al mismo tiempo, el economista considera que actualmente el oficialismo pone dificultades para el crecimiento de la economía nacional, ya que a las empresas no les es fácil abastecerse para desarrollarse. “Hay muchas restricciones para acceder a dólares que te permitan comprar piezas, insumos que se necesitan en procesos productivos. si restringís la cantidad de dólares para importar genera que algunas empresas dicen ‘si en 30 días no me entregan insumos voy a tener que empezar a suspender trabajadores’”, revela Redrado. El complejo panorama también refleja una realidad de los últimos años, así lo sentencia Redrado: “Argentina lamentablemente ha venido declinando hace muchos años. Tenemos una economía que transita por el desfiladero de montaña de un lado el abismo inflacionario y del otro el abismo cambiario”.