SpaceX alista un nuevo intento de lanzamiento de prueba de Starship, el cohete diseñado para enviar astronautas a la Luna y Marte

El despegue previsto para el lunes fue abortado debido a un problema de presurización. Elon Musk arrojó algunas dudas sobre si el lanzamiento realmente se llevará a cabo hoy

SpaceX realizará este jueves un segundo intento de llevar a cabo el primer vuelo de prueba de Starship, el cohete más potente jamás construido, diseñado para enviar astronautas a la Luna, Marte y más allá.

El despegue previsto para el lunes del gigantesco cohete fue abortado menos de 10 minutos antes de la hora prevista debido a un problema de presurización en la primera etapa del propulsor.

La nueva ventana para el despegue desde Starbase, el puerto espacial de SpaceX en Boca Chica, Texas, se abre el jueves a las 8:28 am hora central (13:28 GMT) y dura aproximadamente una hora, dijo SpaceX.

Los trabajadores de SpaceX se muestran junto a Starship cerca de su plataforma de lanzamiento en Boca Chica (REUTERS/Joe Skipper)

El fundador de SpaceX, Elon Musk, que ha tratado de restar importancia a las expectativas para el vuelo de prueba inaugural cargado de riesgos, arrojó algunas dudas sobre si el lanzamiento realmente se llevará a cabo el jueves.

“El equipo está trabajando sin descanso en muchos asuntos”, tuiteó Musk a última hora del martes. “Puede que el 20/4, puede que no”.

La agencia espacial estadounidense NASA ha elegido la nave Starship para transportar astronautas a la Luna a finales de 2025 -una misión conocida como Artemis III– por primera vez desde que el programa Apolo finalizó en 1972.

Starship consiste en una nave espacial de 50 metros de altura diseñada para transportar tripulación y carga que se asienta sobre un cohete acelerador Super Heavy de 230 metros de altura.

SpaceX realizó en febrero una prueba de encendido de los 33 motores Raptor de la primera etapa, pero la nave Starship y el cohete Super Heavy nunca han volado juntos.

El prototipo Starship SN10 durante un test de motores en 2021. (SPACEX / AFP)

El vuelo de prueba integrado tiene por objeto evaluar su rendimiento en combinación.

El lanzamiento del lunes se canceló debido a la congelación de una válvula de presión del cohete Super Heavy y SpaceX tuvo que retrasar otro intento 48 horas para reciclar el metano líquido y el oxígeno líquido que alimentan el cohete.

Musk había advertido antes del lanzamiento que era probable que se produjeran retrasos y problemas técnicos.

“Es un vuelo muy arriesgado”, dijo. “Es el primer lanzamiento de un cohete muy complicado y gigantesco”.

“Hay un millón de maneras en que este cohete podría fallar”, dijo Musk. “Vamos a ser muy cuidadosos y si vemos algo que nos preocupe, lo pospondremos”.

Especie multiplanetaria

La NASA llevará astronautas a la órbita lunar por sí misma en noviembre de 2024 utilizando su propio cohete pesado llamado Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS), que ha estado en desarrollo durante más de una década.

Starship es más grande y potente que SLS y capaz de poner en órbita una carga útil de más de 100 toneladas métricas.

Genera 17 millones de libras de empuje, más del doble que los cohetes Saturno V utilizados para enviar a los astronautas del Apolo a la Luna.

Starship comparado con otros cohetes. Hasta ahora, el cohete más alto de la historia era el Saturno V de las misiones lunares Apolo

El plan para el vuelo de prueba integrado es que el cohete Super Heavy se separe del Starship unos tres minutos después del lanzamiento y caiga en el Golfo de México.

La Starship, que cuenta con seis motores propios, continuará a una altitud de casi 240 kilómetros, completando un círculo cercano a la Tierra antes de amerizar en el Océano Pacífico, cerca de Hawai, unos 90 minutos después del lanzamiento.

“Si llega a la órbita, será un gran éxito”, dijo Musk.

“Si llegamos lo suficientemente lejos de la plataforma de lanzamiento antes de que algo vaya mal, entonces creo que lo consideraría un éxito”, dijo. “Pero que no explote la plataforma de lanzamiento”.

SpaceX prevé poner en órbita una nave estelar y reabastecerla con otra para que pueda continuar su viaje a Marte o más allá.

El cohete Starship está pensado para vuelos interplanetarios

Musk dijo que el objetivo es hacer que la Starship sea reutilizable y bajar el precio a unos pocos millones de dólares por vuelo.

“A largo plazo, es decir, no sé si en dos o tres años, deberíamos conseguir una reutilización completa y rápida”, afirmó.

El objetivo final es establecer bases en la Luna y Marte y poner a los seres humanos en el “camino de ser una civilización multiplanetaria”, dijo Musk.

“Estamos en este breve momento de la civilización en el que es posible convertirnos en una especie multiplanetaria”, afirmó. “Ese es nuestro objetivo. Creo que tenemos una oportunidad”.