Esta mañana se conocieron los resultados de una nueva edición del Center for World University Ranking (CWUR) y hubo malas noticias para las universidades argentinas. Las nueve casas de estudios locales, que figuran entre las 2 mil instituciones top, cayeron con respecto a la clasificación del año.
El de CWUR, con sede en Emiratos Árabes Unidos, es una de las clasificaciones de referencia en el sector de la educación superior. Ya en la edición de 2021 se había reflejado una baja en el desempeño de las universidades argentinas, que ahora se revalidó en el ranking de 2022.
La Universidad de Buenos Aires se sostuvo como la casa de estudios líder a nivel nacional si bien perdió nueve puestos en la clasificación general. En el plano regional, se ubicó como número cinco y se consolidó como la única institución argentina dentro del top 10 de Latinoamérica.
Este año, CWUR midió 19.788 universidades para elaborar la lista de las 2 mil mejores del mundo, pertenecientes a 96 países distintos. Las nueve universidades argentinas clasificadas son públicas. No hay instituciones privadas. El dato llamativo fue que todas cayeron algunas puestos e incluso la Universidad Nacional de Tucumán quedó fuera del ranking en esta edición.
El presidente de CWUR, el Dr. Nadim Mahassen, explicó a Infobae la razón de la caída: “Si bien las mejores universidades de Argentina brindan buena educación y capacitación a sus estudiantes, el factor principal del declive de las instituciones en las clasificaciones es el desempeño de la investigación, en medio de una competencia global intensificada, con instituciones bien financiadas”.
A diferencia del ranking QS, con sede en Gran Bretaña, en el que las universidades argentinas consiguen mejores posiciones, el CWUR pondera principalmente la investigación. No toma en cuenta las encuestas de opinión. Califica a las universidades en cuatro métricas que dan como resultado un número entre 0 y 100:
1) Educación (25%): basado en el éxito académico de los graduados de una universidad. Lo miden por el número de ex alumnos que obtuvieron distinciones importantes.
2) Empleabilidad (25%): ponderan el éxito profesional de los ex alumnos tomando la cantidad de altos cargos ejecutivos que ocupan en las empresas más grandes del mundo.
3) Profesorado (10%): medido por el número de profesores que obtuvieron importantes distinciones académicas.
4) Investigación (40%): toma distintos indicadores como el número de artículos publicados por universidad, la cantidad de papers entre las revistas más prestigiosas y las citas que recibieron esas investigaciones.
Mahassen insistió en la necesidad de fortalecer la investigación en las universidades nacionales. “Si el país aspira a aumentar su competitividad en el escenario mundial, debe invertir más en educación e investigación. Dado que la investigación es un factor clave para medir el desempeño de las instituciones frente a sus pares en todo el mundo, a las universidades de Argentina les resultará cada vez más difícil competir en el futuro con las universidades de élite”, advirtió.
Por el peso que tiene la publicación de artículos en el ranking, a las universidades privadas, de menor tradición de investigación, les cuesta insertarse en esta clasificación. En otras listas que priorizan la opinión de empleadores sí suelen lograr mejores ubicaciones.
En el plano regional, Brasil resultó por diferencia el país más fuerte. Dentro del top 10, posicionó seis universidades (Universidad de San Pablo, de Campinas, de Río de Janeiro, del Estado de San Pablo, de Río Grande del Sur y de Minas Gerais), de las cuales cinco mejoraron su ubicación respecto al año pasado. Luego sigue Chile con dos instituciones (la Universidad Católica y la Universidad de Chile) y México con una (la UNAM) al igual que Argentina.