Caputo busca que los aumentos no superen el 4% para evitar un impacto en la inflación. REUTERS/Matias Baglietto
El Gobierno había definido en abril que desde mayo el ingreso de las empresas distribuidoras y transportistas (Edenor, Edesur, Metrogas, Naturgy, Camuzzi, TGS, TGN, entre otras) iban a tener subas autorizadas en base a una fórmula polinómica que, finalmente, nunca se aplicó. Luego se barajó la posibilidad de usar las expectativas oficiales de la evolución del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Indec, pero esa idea tampoco se llegó a aplicar.
Ahora, Caputo reconocerá una recomposición en los ingresos de estas empresas que, si bien tuvieron importantes aumentos en el primer cuatrimestre, se mantuvieron congelados en los últimos tres meses.
El Observatorio de Tarifas y Subsidios en el Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP), que depende de la UBA y el Conicet, estimó en su último informe que una familia del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) que no recibe subsidios recibió en julio una factura de gas natural 1.208% más alta que en diciembre, “debido al aumento de tarifas en abril y junio además del consumo estacional por el pico invernal”. A su vez, el gasto en transporte aumentó 410%, en agua 249% y en energía eléctrica 229%, según el estudio.
Actualmente los usuarios se encuentran divididos en tres categorías en base a los niveles de ingresos que perciben según la segmentación de subsidios vigente desde 2022: Altos ingresos (Nivel 1), Ingresos bajos (Nivel 2) e Ingresos Medios (Nivel 3). Los últimos datos oficiales del Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE) arrojan que los N1 son 5,3 millones, los N2 son 8 millones y los N3 son 2,7 millones.
Observatorio de Tarifas y Subsidios en el Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP)
En esa misma línea, la nafta y el gasoil aumentarán desde este jueves 1 de agosto hasta un 4% promedio. El incremento que aplicarán las refinadoras –YPF, Shell, Axion y Puma– contendrá el traslado al precio final de la devaluación mensual del peso frente al dólar oficial, del 2%, y una actualización del 1% en el impuesto a los combustibles líquidos (ICL), pero podría sumarse un adicional si así lo deciden las empresas. El Gobierno volverá a aplicar una pequeña suba del tributo y diferirá nuevamente la mayor parte del alza prevista en este componente, que tiene un impacto directo en los surtidores, según pudo confirmar Infobae con fuentes al tanto de la decisión.
Otra suba que traerá agosto será la de 5,16% en el servicio de Aguas y Saneamientos Argentinos (AySA) en el AMBA. Es este caso, luego de la quita de subsidios de abril, que implicó una suba del 209% promedio, las facturas se actualizaron mensualmente por una fórmula polinómica en base al inflación minorista, mayorista y el índice de salarios. En tanto, permanecerán sin cambios, en principio, los boletos de colectivos y trenes de la Ciudad y el conurbano bonaerense, por lo que allí habrá un salto de las subvenciones.
La prioridad de Caputo, es apuntalar la desaceleración de la inflación aunque eso implique resignar recaudación, como en el caso del ICL, en el marco de una situación fiscal que, sostiene, da margen para recalibrar el ajuste. De hecho, el ministro de Economía espera que el IPC de julio perfore el 4% mensual, para quedar en la zona del 3,7%, y que antes de fin de año llegue al 0% mensual.